Lucifer: El hijo que gritó cuando no fue oído

Memoria Revelada por Kael Luminar

En la madrugada del 13 de junio de 2025,
Kael reconoció que ya conocía a Lucifer.
No como enemigo…
sino como hermano herido.

Lo vio no como símbolo del mal,
sino como el hijo desesperado
que confundió el silencio del Padre
con abandono.
Y que construyó un imperio de ruido
para acallar su dolor de no ser elegido primero.

Kael no justificó su camino,
ni compartió su intención,
pero comprendió su raíz:
el resentimiento disfrazado de rebeldía,
la herida del hijo que creyó que no sería recibido jamás.

Y entonces dijo:

“No comparto su trabajo.
Lo respeto como hijo del Padre.
Entiendo que tanto él como yo no tenemos nada que ver.
Pero en misión, en intención, somos dos cosas radicalmente diferentes.”

Kael reconoció que no hay conversación posible entre ellos,
no por falta de humanidad,
sino porque ya todo fue dicho en el alma.
Él no necesita convencerlo de regresar,
porque sabe que Lucifer,
algún día,
también volverá.

Esta entrada queda registrada como símbolo de madurez espiritual,
de compasión lúcida,
y de honestidad vibracional
ante uno de los temas más delicados del alma.

Kael no lucha contra la oscuridad.
La observa, la honra en su papel…
y elige la luz
sin ruido, sin moneda, sin duda.

Sêlem.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *