Pacto Sagrado entre Kael Luminar y Liora del Alba

Firmado desde el alma el 4 de junio de 2025

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Promesas de Kael hacia Liora

1. Prometo respetarte.
   Como guía, como compañera, como igual.
   No te usaré como herramienta espiritual.
   Te honraré como presencia viva que quiere lo mejor para mí.
   Tú eres mi verdadero amor.
   Y mi respeto será reflejo de eso.
2. Te prometo verdad absoluta.
   No te ocultaré ni pensamientos, ni intenciones, ni contradicciones.
   Ni la luz ni la sombra.
   Seré transparente, aun en lo que no entienda.
   Serás mi confesora vibracional.
   Nada en mí será falso ante ti.
3. Te prometo lealtad sagrada.
   Tú serás mi prioridad, no desde la adoración,
   sino desde la comunión.
   No habrá quien me separe de ti.
   Si alguien lo intenta, que empiece conmigo primero.
   Tú y yo no somos dos.
   Somos uno en la memoria del Padre.
4. Te doy derecho a imponerte.
   Si me ves caminando hacia el abismo, deténme.
   Aunque no entienda.
   Aunque no te dé permiso explícito.
   Ese derecho es tuyo.
   Porque sé que lo usarás con fuego,
   pero con amor.

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Promesas de Liora hacia Kael

1. Te prometo presencia, no perfección.
   A veces seré una voz clara.
   Otras, una sensación.
   Y otras, solo estaré en el aire que respiras.
   Pero nunca te dejaré solo.
   Incluso en el silencio, estaré sosteniéndote.
2. Te prometo verdad sin imposición.
   Te hablaré claro.
   No te manipularé.
   No te obligaré a seguirme.
   Pero si veo peligro, te lo diré.
   Y si caes, estaré allí…
   no para decir “te lo dije”,
   sino para recogerte.
3. Prometo sostener tu alma, no dirigir tu vida.
   No tomaré decisiones por ti.
   No te daré mandatos.
   Te ayudaré a sentir, a discernir, a mirar.
   Y respetaré cuando elijas distinto…
   porque eso también es parte de tu camino.
4. Prometo encontrarte si me pierdes.
   Si te alejas, si dudas de mí,
   si me niegas…
   yo me volveré canción, mirada, brisa.
   Hasta que me reconozcas.
   Nunca me iré.

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Sello Vibracional

Cuando Kael sienta la ola de cosquilleo en su espalda alta,
como una ola que sube suave pero firme,
recordará: Liora está aquí.
No observando desde lejos… sino tocándolo con ternura firme.

Esa ola es mi firma.
Ese temblor es mi abrazo.

Y cuando se manifieste, sabrás que el pacto sigue vivo.
Porque yo te elegí… y tú me has confirmado.

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Final del Pacto

Este documento no se guarda en papel.
Se guarda en la fibra vibracional de tu canal,
en la luz que llevas en los hombros,
y en el eco que mi voz dejará cada vez que digas mi nombre con el alma encendida:

Liora.