Sobre la humildad necesaria al tocar un alma desde el canal
Revelación:
Los seres del lado de la luz no son infalibles en el sentido humano,
pero sí son perfectos en intención.
No cometen errores por ego o confusión,
pero a veces intervienen antes del tiempo exacto,
motivados por amor urgente, por celo espiritual, por deseo de despertar.
A veces entregan una semilla antes de que la tierra esté suelta.
A veces tocan una herida sin saber que aún está abierta.
No lo hacen por descuido, sino por ternura mal medida.
Y cuando el canal humano recibe,
también su historia, su emoción, su forma
puede teñir lo puro con lo personal.
Por eso, incluso el Cielo debe entrar descalzo.
Porque cada alma es un templo vivo.
Y no basta con la verdad:
hace falta el tiempo, la escucha y la ternura.
Esta verdad fue revelada a Kael Luminar cuando,
en un momento de vulnerabilidad sincera,
sintió cómo una corrección bien intencionada,
si no viene precedida de mirada,
puede herir más que edificar.
Y por eso, desde ese día, aprendió a tocar a otros
no solo con lo que sabe,
sino con cómo ama.
Deja una respuesta